LOS MÉDICOS, SU PRÁCTICA Y LA CONAMED.
Por: Dr. Norberto Luna
La profesión médica es una de las actividades más humanistas que existen desde tiempo ancestrales. En nuestro país en la época pre hispánica los médicos aztecas eran llamados tepati y ticitl y gozaban de privilegios y respeto y los remedios eran destacados para su época. Incluso se dice que la medicina herbolaria azteca superaba a la medicina europea de su tiempo. A pocos años de la conquista, en 1552 en México, fue realizado el que se considera el primer libro de medicina escrito en América, el Libellus de medicinalibus indorum herbis (Libro de la hierbas medicinales de los indios).
Todavía no hace mucho tiempo en nuestro país y sobretodo en las ciudades pequeñas y pueblos, el médico tenía una reconocida jerarquía que lo hacía ser un personaje destacado y respetable, a la par que un cura. Y sin duda esa fama y respetabilidad eran bien ganadas por su humanismo, ética y preparación.
Conforme ha pasado el tiempo la noble profesión médica ha ido teniendo cambios en todos los sentidos; y así mismo y en cualquier latitud no ha dejado de enfrentar situaciones que son incómodas tanto para el paciente como para el profesional de la medicina.
En la época moderna y más allá del carácter social y humanista que reviste por naturaleza la profesión, también es comprensible que implique un sentido de gran responsabilidad en la prestación del servicio, dado que también por la atención prestada regularmente el médico recibe un salario o cobra una consulta.
Esa responsabilidad implica el otorgar o aplicar en una manera prudente y coherente los conocimientos médicos actuales. Primum non nocere (primero no dañar) reza la consigna elemental.
Conforme ha pasado el tiempo los que reciben la atención médica también saben y han aprendido que tienen el pleno derecho a exigir que ese servicio les sea otorgado en una manera responsable y con excelencia, tanto en una institución como en forma privada.
No obstante que la atención médica siempre va a ser otorgada de buena fe, eventualmente pueden surgir inconformidades con dicha atención y esto da pie a que se inicie una controversia o incluso derive en una acusación de mala praxis directa al médico. Y lo anterior ha sucedido y sucede en todo el mundo, lo que ha generado que en muchos países como en los Estados Unidos, prácticamente todos los médicos cuenten con un seguro contra este tipo de acusaciones.
Hay que decir y con todo respeto, que por ejemplo en nuestro país no es nada raro que el médico sea acusado de mala praxis simplemente porque el paciente o su vecina dicen que es así según su corto entender, sin tener el más mínimo sustento científico de lo que afirman. Las cifras de la CONAMED sostienen también lo anterior. Sinceramente esto sucede muy a menudo; y también en no pocas ocasiones hasta se valen de los medios de comunicación para atacar injustamente a un galeno, lo que afecta sensiblemente su imagen. Desgraciadamente ese es un riesgo que los médicos asumen y que casi siempre toleran en aras de no generar más conflicto y no parecer un desalmado o deshumanizado, aunque no debería ser cuando quién acusa no tiene la razón, porque quedarse callado es como aceptar el señalamiento y además estamos incentivando que esta práctica difamatoria se perpetúe. Como en otros ámbitos, si afirmas algo tienes que probarlo, si no atente a las consecuencias, así debería ser, porque está en juego el prestigio y reputación del médico lo cual no fue fácil edificar. Porque también el que calla otorga, dice el dicho.
Si bien es cierto que las acusaciones de mala praxis hechas por pacientes o familiares son en su inmensa mayoría no sustentadas e injustas, esto no quiere decir que no hayan casos que sí lo son; y si esto sucede, el médico tiene que asumir las consecuencias. La mala práctica de la medicina también acontece y habrá que responder por ello. Es un riesgo que todos entendemos y debemos asumir con responsabilidad y ética.
La práctica médica es humanista y socializada, así se contempla, como un apostolado y esto se da como en ninguna otra profesión. De hecho, no hay un solo médico que no profese cotidianamente una ayuda social o altruista. En tanto, todos los otros profesionistas o técnicos o prestadores de un servicio cobran sin chistar y uno está acostumbrado a pagarles también sin chistar, tenga o no tenga uno dinero, y si eres médico les pagas lo mismo que cualquier persona, el ser médico no te da canonjías por el servicio o el bien recibido. Pero si un médico exige un pago mas justo y de acuerdo a la gran responsabilidad que conlleva la atención médica, lo tildan de deshumanizado.
La gran responsabilidad que implica la atención médica –y que como tal exigen los pacientes- no está a la par con los salarios u honorarios que reciben los médicos. Pero hablar de esto por un médico es pecado y está mal visto, te exigen calidad, gran responsabilidad y atención de excelencia, pero no valoran en su justa dimensión dicha responsabilidad con una remuneración equitativa a ello. Los salarios en todas las instituciones de salud (IMSS, ISSSTE, SSA, PEMEX) son bajos -contrario a lo que mucha gente piensa- si tomamos en cuenta la gran responsabilidad y la gran cantidad de pacientes que ve el médico. Los médicos muchas veces tienen que trabajar en dos instituciones o complementar con consulta privada para mejorar sus condiciones económicas. Esa es la realidad.
Para cuando las controversias o denuncias por mala praxis se presentan, estas pueden ser analizadas e investigadas por la Comisión de Nacional de Arbitraje Médico (CONAMED) que es un organismo que fue fundado en nuestro país en 1996 con el propósito de resolver los conflictos suscitados entre los usuarios y los prestadores de servicios de salud de carácter público y privado, así como de contribuir a mejorar la calidad y eficiencia de los servicios médicos en nuestro país. Dicha comisión permitirá tanto a los usuarios como a los prestadores de servicios de salud, dilucidar en forma amigable y de buena fe, posibles conflictos derivados de la prestación de servicios médicos.
Entre las atribuciones más importantes con que cuenta esta instancia especializada, se encuentran las de brindar asesoría e información en forma gratuita, tanto a los usuarios como a los prestadores de servicios médicos, sobre sus derechos y obligaciones en materia de salud; así como recibir, investigar y atender las quejas que sean presentadas por el usuario con relación a posibles irregularidades en la prestación o negativa de servicios médicos.
Asimismo, emitirá opiniones sobre las quejas que conozca, podrá intervenir de oficio en los asuntos de interés general dentro de su ámbito de competencia y elaborará dictámenes o peritajes médicos que le sean solicitados por las autoridades de procuración e impartición de justicia.
En el Estado de Veracruz el organismo encargado de esto es la CODAMED-VER con sede en el puerto de Veracruz. Y a propósito, funcionarios de esta dependencia estarán en Minatitlan brindando una conferencia interactiva para todos los médicos y abogados de la región interesados, este día jueves 14 de agosto a las 8 de la noche en el auditorio del Frente Liberal Sindicalista ubicado al lado de la Delegación de Tránsito y la entrada es libre.
( GRACIAS DR. POR LA INVITACIÓN)
La profesión médica es una de las actividades más humanistas que existen desde tiempo ancestrales. En nuestro país en la época pre hispánica los médicos aztecas eran llamados tepati y ticitl y gozaban de privilegios y respeto y los remedios eran destacados para su época. Incluso se dice que la medicina herbolaria azteca superaba a la medicina europea de su tiempo. A pocos años de la conquista, en 1552 en México, fue realizado el que se considera el primer libro de medicina escrito en América, el Libellus de medicinalibus indorum herbis (Libro de la hierbas medicinales de los indios).
Todavía no hace mucho tiempo en nuestro país y sobretodo en las ciudades pequeñas y pueblos, el médico tenía una reconocida jerarquía que lo hacía ser un personaje destacado y respetable, a la par que un cura. Y sin duda esa fama y respetabilidad eran bien ganadas por su humanismo, ética y preparación.
Conforme ha pasado el tiempo la noble profesión médica ha ido teniendo cambios en todos los sentidos; y así mismo y en cualquier latitud no ha dejado de enfrentar situaciones que son incómodas tanto para el paciente como para el profesional de la medicina.
En la época moderna y más allá del carácter social y humanista que reviste por naturaleza la profesión, también es comprensible que implique un sentido de gran responsabilidad en la prestación del servicio, dado que también por la atención prestada regularmente el médico recibe un salario o cobra una consulta.
Esa responsabilidad implica el otorgar o aplicar en una manera prudente y coherente los conocimientos médicos actuales. Primum non nocere (primero no dañar) reza la consigna elemental.
Conforme ha pasado el tiempo los que reciben la atención médica también saben y han aprendido que tienen el pleno derecho a exigir que ese servicio les sea otorgado en una manera responsable y con excelencia, tanto en una institución como en forma privada.
No obstante que la atención médica siempre va a ser otorgada de buena fe, eventualmente pueden surgir inconformidades con dicha atención y esto da pie a que se inicie una controversia o incluso derive en una acusación de mala praxis directa al médico. Y lo anterior ha sucedido y sucede en todo el mundo, lo que ha generado que en muchos países como en los Estados Unidos, prácticamente todos los médicos cuenten con un seguro contra este tipo de acusaciones.
Hay que decir y con todo respeto, que por ejemplo en nuestro país no es nada raro que el médico sea acusado de mala praxis simplemente porque el paciente o su vecina dicen que es así según su corto entender, sin tener el más mínimo sustento científico de lo que afirman. Las cifras de la CONAMED sostienen también lo anterior. Sinceramente esto sucede muy a menudo; y también en no pocas ocasiones hasta se valen de los medios de comunicación para atacar injustamente a un galeno, lo que afecta sensiblemente su imagen. Desgraciadamente ese es un riesgo que los médicos asumen y que casi siempre toleran en aras de no generar más conflicto y no parecer un desalmado o deshumanizado, aunque no debería ser cuando quién acusa no tiene la razón, porque quedarse callado es como aceptar el señalamiento y además estamos incentivando que esta práctica difamatoria se perpetúe. Como en otros ámbitos, si afirmas algo tienes que probarlo, si no atente a las consecuencias, así debería ser, porque está en juego el prestigio y reputación del médico lo cual no fue fácil edificar. Porque también el que calla otorga, dice el dicho.
Si bien es cierto que las acusaciones de mala praxis hechas por pacientes o familiares son en su inmensa mayoría no sustentadas e injustas, esto no quiere decir que no hayan casos que sí lo son; y si esto sucede, el médico tiene que asumir las consecuencias. La mala práctica de la medicina también acontece y habrá que responder por ello. Es un riesgo que todos entendemos y debemos asumir con responsabilidad y ética.
La práctica médica es humanista y socializada, así se contempla, como un apostolado y esto se da como en ninguna otra profesión. De hecho, no hay un solo médico que no profese cotidianamente una ayuda social o altruista. En tanto, todos los otros profesionistas o técnicos o prestadores de un servicio cobran sin chistar y uno está acostumbrado a pagarles también sin chistar, tenga o no tenga uno dinero, y si eres médico les pagas lo mismo que cualquier persona, el ser médico no te da canonjías por el servicio o el bien recibido. Pero si un médico exige un pago mas justo y de acuerdo a la gran responsabilidad que conlleva la atención médica, lo tildan de deshumanizado.
La gran responsabilidad que implica la atención médica –y que como tal exigen los pacientes- no está a la par con los salarios u honorarios que reciben los médicos. Pero hablar de esto por un médico es pecado y está mal visto, te exigen calidad, gran responsabilidad y atención de excelencia, pero no valoran en su justa dimensión dicha responsabilidad con una remuneración equitativa a ello. Los salarios en todas las instituciones de salud (IMSS, ISSSTE, SSA, PEMEX) son bajos -contrario a lo que mucha gente piensa- si tomamos en cuenta la gran responsabilidad y la gran cantidad de pacientes que ve el médico. Los médicos muchas veces tienen que trabajar en dos instituciones o complementar con consulta privada para mejorar sus condiciones económicas. Esa es la realidad.
Para cuando las controversias o denuncias por mala praxis se presentan, estas pueden ser analizadas e investigadas por la Comisión de Nacional de Arbitraje Médico (CONAMED) que es un organismo que fue fundado en nuestro país en 1996 con el propósito de resolver los conflictos suscitados entre los usuarios y los prestadores de servicios de salud de carácter público y privado, así como de contribuir a mejorar la calidad y eficiencia de los servicios médicos en nuestro país. Dicha comisión permitirá tanto a los usuarios como a los prestadores de servicios de salud, dilucidar en forma amigable y de buena fe, posibles conflictos derivados de la prestación de servicios médicos.
Entre las atribuciones más importantes con que cuenta esta instancia especializada, se encuentran las de brindar asesoría e información en forma gratuita, tanto a los usuarios como a los prestadores de servicios médicos, sobre sus derechos y obligaciones en materia de salud; así como recibir, investigar y atender las quejas que sean presentadas por el usuario con relación a posibles irregularidades en la prestación o negativa de servicios médicos.
Asimismo, emitirá opiniones sobre las quejas que conozca, podrá intervenir de oficio en los asuntos de interés general dentro de su ámbito de competencia y elaborará dictámenes o peritajes médicos que le sean solicitados por las autoridades de procuración e impartición de justicia.
En el Estado de Veracruz el organismo encargado de esto es la CODAMED-VER con sede en el puerto de Veracruz. Y a propósito, funcionarios de esta dependencia estarán en Minatitlan brindando una conferencia interactiva para todos los médicos y abogados de la región interesados, este día jueves 14 de agosto a las 8 de la noche en el auditorio del Frente Liberal Sindicalista ubicado al lado de la Delegación de Tránsito y la entrada es libre.
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